tener buena voluntad y ganas de divertirse. Hay que tener también energía, y mucha, y a quienes vienen a hacer deporte a los
Alpes de la Alta Val Susa y Chisone y a las
Pequeñas Estaciones Invernales nos les faltará nunca la vitalidad y la potencia: los menús enogastronómicos de alta cota contemplan los mejores
platos de la tradición piamontesa, además, por supuesto, de una serie de productos típicos excelentes.
El Alto Valle de Susa, el Val Chisone y Pinerolese pedemontano, así como los Valles de Lanzo y del Canavese, son baluartes de una cocina profundamente vinculada al territorio, que en la mesa sugiere al turista la degustación de un amplio surtido de quesos, embutidos fabricados artesanalmente, pan y dulces elaborados con ingredientes de origen exclusivamente local, exquisitos platos a base de carnes de caza.
Y en los restaurantes, también hay espacio para el resto de la tradición regional e italiana y, en muchos casos, también para las culturas transalpinas: los mejores cocineros sabrán proponer la tradición enogastronómica del territorio en un ambiente en el que no faltará la especial acogida y el ambiente cálido típico de la vida alpina.